El chileno era el indicado por el DT del Leverkusen para disparar, el alemán terminó haciéndolo y Vidal no celebró el gol.
SANTIAGO.- Es sabido que Arturo Vidal es de personalidad fuerte. Agrandado dirían algunos. Esa característica, sumada a su gran capacidad futbolística lo tienen jugando hace un par de años en la Bundesliga. En el Bayer Leverkusen.
Ayer, en el duelo en que su equipo venció por 3-0 al Tavriya de Ucrania el chileno demostró nuevamente que no se achica ante nadie. Ni ante el máximo ídolo del equipo, que volvió en gloria y majestad esta temporada desde el Chelsea: Michael Ballack.
Cuando iban 90 minutos de partido el árbitro cobró un penal a favor de las aspirinas e inmediatamente tres jugadores fueron a pararse cerca de la pelota: Vidal, Ballack y el autor de los dos primeros tantos, Michal Kadlec.
Según consigna el diario Bild , el primero en retirarse de la jugada fue Kadlec. Vidal hasta el último momento quiso patear. Finalmente, quien colocó el balón al costado derecho del portero fue el seleccionado alemán.
Pero eso no fue todo. El ex Colo Colo no se sacó de la cabeza la discusión y no fue a abrazar al germano tras su primera conquista oficial luego de su retorno al equipo.
Y al final del partido, el DT Jupp Heynckes le dio la razón al seleccionado chileno al decir que " Arturo es realmente nuestro primer pateador. Él ha dado generosamente a Ballack el balón".
El diario germano ironiza con esas declaraciones y se cuestiona todo: "¿De modo generoso? Eso ha sido más bien de mala gana".
A pesar de esto, Ballack le quiso bajar el perfil a la situación. "Todo el mundo quería disparar, pero los muchachos me han dejado ir primero, y estoy agradecido. Esto demuestra que el espíritu de equipo está intacto", dijo.
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