Aisha en la portada de Time
En su última edición, la revista Time mostró por medio de un inquietante registro fotográfico cómo la ideología represiva de los talibanes es capaz de llevar a cabo horrorosas prácticas contra las mujeres en Afganistan. Esto, gracias al sincero relato de una mujer “esclavizada” por sus pares en pleno siglo XXI.
Se trata de Aisha, una afgana de 18 años que fue víctima de un insólito ataque por parte de un jefe talibán que la dejó mutilada de nariz y orejas luego de cometer una terrible falta a ojos del grupo extremista: escapar de la familia de su marido que la trataba como una esclava. Esto sería una situación aparentemente común al interior de dicha sociedad, donde el respeto por las uniones es sagrado y las mujeres están en un tercer plano.
Lo que a unos puede parecerle justo, para otros -como el equipo detrás de la publicación estadounidense- es inconcebible: “Pensé mucho sobre si debía poner o no esa imagen. Yo quería asegurarme de que Aisha no perdiera su seguridad por esto y que entendiera lo que significaba su cara en la tapa. Ella sabe que se convertirá en el símbolo del precio que las mujeres afganas han tenido que pagar por la ideología represiva de los talibanes” señaló el editor Richard Stengel en declaraciones recogidas por Infobae.
Sin embargo, junto con graficar los malos tratos hacia el género femenino, desde la revista acompañaron la portada con la frase “¿Qué pasará si nos retiramos de Afganistán?”, aludiendo a la ocupación de las tropas de Estados Unidos en el país y mostrando su apoyo.
Desde 2001, al poco tiempo del ataque a las Torres Gemelas, los militares estadounidenses han ocupado el país asiático y los enfrentamientos entre las fuerzas han provocado cientos de muertes. Pese a este panorama, para Time es necesario que sus militares vigilen el lugar y eviten que los guerrilleros del Islám sigan imponiendo el terror en la población.
Cabe recordar, no obstante, que ésta no es la primera vez que el grupo realiza macabras prácticas: el año pasado un campesino fue atacado por los talibanes por el sólo hecho de ir a votar en medio de unas elecciones políticas. Producto del incidente, sus orejas y nariz fueron mutiladas al igual que las de Aisha.
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