Valentina Roth carreteó con Úbeda de lo más acaramelados

La bailarina y el futbolista siguen dando que hablar. Tras ponerle fin al romance que habían comenzado sólo hace 28 días, anoche estuvieron en Gigantes con Vivi, y luego se fueron a una discotheque a “regalonear” con condiciones.

Como invitada al estelar de Mega, Gigantes con Vivi, llegó Valentina Roth para contar detalles de su quiebre amoroso con Juan Pablo Úbeda. Una vez instalada en el set y dispuesta a conversar, entró de sorpresa su ex al estudio. Con un ramo de rosas blancas, una cara de culpable y un romántico “te amo”, se acercó para pedirle perdón. La molestia en la bailarina se hiso notar de inmediato, pues su cara lo decía todo.

A la salida del espacio, los tortolitos se fueron juntos en el auto del jugador sin querer hablar con la prensa, rumbo a la discotheque Kadilac, donde iban a pasar un grato momento para aclarar ciertos puntos y comenzar a reconciliarse. La hija de Rodolfo no le cerró las puertas a su galán, ya que contó a En Portada que a pesar del condoro que se mandó, sigue enamorada del zaguero.

Sin embargo, Juan Pablo, está dispuesto a hacer cualquier cosa para reconquistar el rebelde corazón de la joven y asumió que ha cometido el error más grave de su vida, del cual está arrepentido. Contó que la ama y que se la va a jugar por ella. Pero Valentina no le cree mucho, ya que como muchas, tiene “orgullo de mujer”, por lo que a pesar de estar enamorada, no lo perdonará tan fácilmente.

Dentro de dos semanas la chiquilla se tomará unas vacaciones para descansar de tanta polémica. Pero no se irá sola ya que contó que ha tenido conversaciones con su ex y que ambos tendrían la intención de viajar juntos. Entre otras cosas, contaron que esta pelea no se trata de un tongo, sino que lamentablemente la relación se hizo tan pública, que han debido contar todo ante las cámaras.

En relación a Pelotón, la bailarina había decidido ingresar sólo si entraba acompañada de quien era su pololo al momento de las negociaciones con TVN al encierro. Sin embargo, descartó de lleno la posibilidad de entrar a la base militar, por sanidad mental.