Las mujeres musulmanas disfrutan, como toda persona, su derecho a chapotear en el agua durante los días de calor. Sin embargo, dada su cultura, no se bañan con provocativos trajes de baño sino con un tapado “Burkini” que ya es sensación en Egipto y otros países del mundo árabe.
¿De qué se trata esta peculiar prenda? El Burkini, que lleva su nombre en honor a la Burka y el Bikini, es la versión musulmana del bañador femenino que está conformado por una malla de lycra que se seca rápidamente y evita mostrar el cuerpo -sólo deja a la vista la cara, pies y manos de quienes lo usan-.
Pero además, simboliza la constante batalla de las mujeres por ser respetadas en medio de una cultura represiva: “¿Qué hacían las veladas antes de que se inventara esto? No podían ir a nadar o bien tenían que hacerlo con otras chicas o familiares”, declaró una empresaria de estos trajes, Nevine, a la Agencia EFE.
Sin embargo, este mismo contexto cultural del Burkini ha hecho muy famosa a la prenda en lugares como Egipto y ha llevado a miles de féminas alrededor del mundo -en países de Europa y en otras latitudes como Estados Unidos- a adquirir la vestimenta y lucirla en sus destinos de verano.
La entrevistada por último señaló que este invento está dedicado a las mujeres que usan velo y, por ende, “tienen prohibido mostrar su cuerpo en público, pero que no desean renunciar a bañarse en la piscina o en la playa”.
Para refrescarse en el agua, las musulmanas y demás interesadas pueden adquirir un Burkini a precios que oscilan entre los 35 y 79 dólares (18 mil 270 y 41 mil 200 pesos chilenos).