Además de cortarse la luz, se cayeron objetos, incluso televisores, nadie durmió ni fue a clases hoy y nació una guagua entre medio de las réplicas.
SANTIAGO.- Una nueva noche para olvidar vivieron los habitantes de Lebu, quienes esta madrugada fueron remecidos por un fuerte sismo de 5,7 grados Richter, que dejó el pueblo a oscuras, haciendo revivir los instantes posteriores al terremoto de febrero, lo que provocó una masiva evacuación a los cerros por temor a otro tsunami.
El alcalde de Lebu, Carlos González, explicó a Emol que la sensación de temor se vio incrementada por lo extenso que fue el sismo. "Duró más de medio minuto, eso alarmó a la gente", cuenta el edil. También señala que en todas las casas que catastraron se cayeron objetos. "Se cayeron televisores, losa y algunos muebles, así que la percepción tiene que haber llegado a grado VII", comentó.
A esto se sumó que fue una seguidilla de temblores, dos de ellos muy intensos –de 5,7 y 5,2 grados Richter–, "así que evidentemente la gente huyó".
Tras el primer sismo, se cortó la energía eléctrica durante toda la noche y por cerca de una hora estuvieron saturadas las comunicaciones, tanto red fija como celulares.
El alcalde indicó que, pese al temor que reinaba, la gente evacuó hacia zonas altas con mucha tranquilidad. "No fue una estampida ni mucho menos, fue una evacuación bastante ordenada", destacó el edil, aunque indicó que hubo algunos casos de personas con crisis de pánico.
Detalló en total evacuaron unas 7 mil personas –de los 20 mil habitantes que tiene Lebu–, quienes a pesar de que el SHOA descartó una alerta de tsunami, en su mayoría permanecieron por cerca de cuatro horas en los cerros. "Hay personas que estuvo arriba hasta que aclaró y regresó en la mañana", señaló González.
Todos ellos debieron soportar el intenso frío que se sintió durante toda la noche en la zona y luego la lluvia que comenzó a caer durante la mañana.
Como pocos pudieron dormir, los padres hoy no enviaron a sus hijos a clases, lo que fue autorizado por las autoridades locales. "Todo el pueblo estuvo en vela toda la noche, así que no se pudo hacer clases", explicó el alcalde, aunque aclaró que mañana los cerca de 6 mil alumnos de Lebu retomarán sus actividades académicas.
Indicó que una vez que la gente retornó a sus hogares, constató algunos daños en sus viviendas, principalmente caída de estucos y fisuras del terremoto anterior que volvieron a quedar expuestas.
Señaló además que cerca de las 2.30 de la madrugada, justo en medio de las dos réplicas más fuertes, nació una guagua en el Hospital de Lebu. "No hubo ningún problema, está bien y el personal médico actuó muy bien", informó.
Se restableció la energía
El alcalde señaló que cerca de las 12.30 horas de hoy quedó completamente restablecido el suministro eléctrico en todo el pueblo y "la situación ya ha vuelto a la normalidad".En cuanto al último sismo, de 5,7 grados Richter , que se registró esta tarde en la misma zona, el jefe comunal indicó que no se reportaron problemas. "Fue bastante intenso, la gente se preocupó, pero no se alarmó como anoche, así que no tuvimos mayores inconvenientes", detalló.