Similar a la polémica mano de Suárez que salvó de la eliminación a Uruguay en el minuto 120, y que a la larga dejó fuera del Mundial a Ghana, la semana anterior estuvo marcada por otro cruce de manos cuyas repercusiones trascendieron al mundo del fútbol para ingresar en la arena política.
Esto porque luego del frío encuentro del seleccionador nacional Marcelo Bielsa con el presidente Sebastián Piñera, sumado al rechazo a saludar al subsecretario de Deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, surgieron toda clase de hipótesis para explicar el desaire del argentino al Gobierno en el propio palacio de La Moneda.
Sin embargo no todos conocen las verdaderas razones de Bielsa para sentir desafecto -por decir lo menos- de las autoridades oficialistas; razones que también explican su cercanía con la ex presidenta Michelle Bachelet y que tienen sus raíces desde la visión deportiva del rosarino… hasta el pasado político de su familia.
1. Apoyo a Harold Mayne-Nicholls: Para nadie es secreto que uno de los grandes aliados que tiene Marcelo Bielsa en Chile es precisamente quien lo trajo al país, el presidente de la ANFP, Harold Mayne-Nicholls.
Igualmente, para pocos es desconocida la pésima relación que sostiene Mayne-Nicholls con Piñera y, sobre todo, con Gabriel Ruiz-Tagle, diferencias que según cuenta Cambio 21, iniciaron en 2009 con la pugna por el reparto de los 30 millones de dólares en beneficios que arrojaba el Canal del Fútbol (CDF).
En aquel entonces el timonel de la ANFP se inclinó por una distribución equitativa de los dineros entre todos los clubes del fútbol chileno. Su postura chocó radicalmente con la de Ruiz-Tagle, entonces presidente y hasta hoy accionista de un 30% de Blanco y Negro, administradora de Colo-Colo, quien quería una tajada mayor para los 3 grandes clubes del país.
La situación no sólo enfrentó a ambos dirigentes, sino que dejó un mal sabor de boca en el técnico trasandino, quien vio en la actitud de Ruiz-Tagle una actitud egoísta en el interés de su club, en detrimento del fútbol nacional.
Sensación que -por cierto- aumentó cuando el entonces presidente de Colo-Colo puso trabas para prestar jugadores del Cacique a la propia selección, como cuenta El Mostrador.
2. Mezcla fatal de Fútbol, Política y Negocios: Otra razón que influye en esta lucha a 4 bandas son las diferencias motivacionales. Para Piñera y Ruiz-Tagle, el fútbol es un negocio, e incluso una oportunidad política. Para Mayne-Nicholls en tanto, de profesión periodista, y para el propio Bielsa, el fútbol es una pasión.
Según narra a Cambio 21 el ex presidente de la Universidad de Chile, René Orozco, muchos vieron con reproche que el actual Presidente de la República hipotecara una militancia de 22 años como hincha de Universidad Católica para unirse a Wanderers cuando postuló al Senado por Valparaíso, cambiando finalmente a Colo Colo mientras aspiraba a la primera magistratura.
“Piñera dice que es muy amigo del alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, el accionista principal de Boca Juniors. El desde niño es hincha de este club. Llegó a ser presidente de Boca. Es como que a estas alturas, 55 años, se cambiará a River Plate ya que es también pre candidato presidencial en Argentina. Lo mismo en Italia: todos saben que Berlusconi llegó a ser Presidente del Milan y luego Primer Ministro. Era hincha de este equipo desde pequeño. Todos tienen más que claro que no se cambiaría a su rival eterno, el Inter, también de Milán”, confiesa un ex presidente de la ANFP al semanario.
3. Los conflictos de interés de Ruiz-Tagle: Pero este cóctel toca también al Subsecretario de Deportes en un doble rol que no sólo molesta a Bielsa, sino a otros actores políticos.
Como autoridad deportiva del Gobierno, Ruiz-Tagle tiene bajo su tuición fiscalizadora a las sociedades anónimas, mientras él sigue siendo uno de los principales accionistas en Colo-Colo, constituyéndose en un incómodo juez y parte.
Si a esto se suma que el seleccionador nacional confirmó en enero su desagrado con el proyecto de sociedades anónimas deportivas (SAD) que despachó el propio Piñera mientras era senador, se entiende mejor la diferencia de visiones.
“El fútbol es del pueblo”, aseveró Bielsa en una visita a Curicó, secundado por Mayne-Nicholls, recuerda Cambio 21.
4. Cercanía con la ex presidenta Bachelet: Según cuenta The Clinic, la amistad con la ex Mandataria data del compromiso que tuvo con la organización del Campeonato Mundial Femenino Juvenil de Fútbol en 2008, respaldado por la construcción de una nueva red de estadios e infraestructura deportiva a lo largo del país.
Esto le granjeó también la simpatía del técnico rosarino, quien en un gesto inusitado la acompañó a un recorrido por Juan Pinto Durán, visita al plantel en Sudáfrica e incluso sonrisas y piropos mutuos que gatillaron la picardía de los comentarios nacionales.
5. El pasado político de su familia: Sin embargo existe un factor casi desconocido que agrega fricciones con la derecha política.
El hermano de Marcelo Bielsa y actual diputado frentista, Rafael, fue secuestrado en 1977 por organismos de la dictadura argentina y torturado salvajemente en un centro de detención clandestino.
El también ex ministro de RR.EE. de Kirchner sufrió aplicación de corriente y un simulacro de fusilamiento, tras lo cual estuvo exiliado hasta 1980.
La dura experiencia de su hermano llevan a muchos a pensar que Marcelo Bielsa pudo proyectar su antipatía por las dictaduras al actual gobierno de Sebastián Piñera, considerando que varios de sus partidarios fueron simpatizantes e incluso funcionarios del Régimen Militar chileno.
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