El meta brasileño Julio Sergio se lesionó en el duelo ante Brescia y no pudo abandonar el campo, ya que se habían agotado los cambios.
ROMA.- El portero brasileño de la Roma Julio Sergio se convirtió en el triste protagonista de la cuarta jornada de la liga italiana debido a su grave lesión en el tobillo y a su llanto desconsolado durante los minutos en los que tuvo que permanecer en la cancha, ya que se habían agotado todos los cambios.
Toda la prensa italiana recoge la fotografía del compañero de David Pizarro llorando de dolor e impotencia, apoyado en los postes del arco, mientras se jugaban los últimos minutos de un encuentro en el que el Roma perdió por 2-1 contra el Brescia.
El técnico romanista Claudio Ranieri había efectuado todos los cambios y, además, el equipo se había quedado con diez jugadores tras la expulsión del francés Philippe Mexes.
Por ello, Julio Sergio se vio obligado a permanecer en su puesto durante más de cinco minutos, a pesar de una grave torcedura en el tobillo derecho que le producía un "dolor insoportable".
El guardameta carioca dejó el terreno de juego ayudado por los masajistas del Roma, ya que le era imposible caminar.
Según una primera hipótesis, Julio Sergio estará fuera de los terrenos de juego al menos dos semanas, aunque se cree que la gravedad de la torcedura le obligará a estar cerca de un mes fuera de las canchas.
La baja del portero brasileño pesa como una losa para un Roma en crisis, con tan sólo dos puntos en el campeonato, y que en la próxima jornada se enfrenta al Inter de Milán. La semana que viene también le espera una nueva cita en Liga de Campeones.
Fuente: Emol.com
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