El presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Alejandro Goic, dijo que en el país existen 20 casos y recalcó que "no hay lugar en el sacerdocio para quienes abusan de menores".
Monseñor Goic leyó el mensaje elaborado por todos los obispos durante su 99° Asamblea Plenaria, celebrada entre el 12 y 16 de abril en Punta de Tralca.
SANTIAGO.- En medio de las denuncias de abusos sexuales cometidos por sacerdotes que han remecido al mundo, la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) emitió una declaración en la que pidió perdón a quienes se han visto perjudicados por este tipo de hechos en el país.
"No hay lugar en el sacerdocio para quienes abusan de menores, y no hay pretexto alguno que pueda justificar este delito. A las personas directamente afectadas y a las comunidades que en Chile han visto en algún sacerdote motivo de escándalo, les pedimos perdón, y les exhortamos a comunicarnos estos hechos", dijo el presidente de la CECh, monseñor Alejandro Goic.
"Es total nuestro compromiso de velar incesantemente porque estos gravísimos delitos no se repitan", añadió el prelado, quien sostuvo que en el país se han registrado 20 casos de este tipo.
"Hay cinco sacerdotes que han sido condenados, hay cinco cuyos procesos se están desarrollando y hay unas diez acusaciones de las cuales algunas han sido absueltas y otras están en estudio", detalló.
Una semana después que el cardenal Francisco Javier Errázuriz comentara que en Chile "hay poquitos" casos de pedofilia al interior de la Iglesia, los obispos de todo el país participaron en su 99° Asamblea Plenaria, donde este asunto fue uno de los temas principales, junto a las lecciones que deja el terremoto de febrero pasado.
Del encuentro surgió el mensaje leído este martes por el presidente de la Conferencia Episcopal, en el que los religiosos también expresaron su adhesión al Papa Benedicto XVI, ante las "injustas y falsas acusaciones que ha recibido". De igual forma, agradecieron sus "claras orientaciones" sobre la materia.
"Los obispos hemos meditado acerca del modo en que hemos enfrentado, como pastores y como Iglesia, los casos que se han denunciado en nuestro país. También hemos analizado la forma en que estos delitos nos desafían a valorar más aún la fidelidad de los presbíteros y consagrados a su misión apostólica, los procesos de discernimiento vocacional, de admisión a los seminarios y de acompañamiento espiritual a los sacerdotes. En esta reunión hemos actualizado nuestra manera de aplicar la normativa canónica que nos obliga a actuar con rigor frente a eventuales denuncias, aplicación que habíamos establecido ya en mayo de 2003", explicó Goic.
La declaración de los prelados concluyó abogando porque estos hechos "tan dolorosos" no impidan valorar la labor solidaria y fraterna de la Iglesia.
Fuente: Emol
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